Hoy en día muchísima gente piensa que tener éxito o dinero son marcadores fiables de una vida plena.

Pero como sabes, el dinero y el éxito va y viene y, sinceramente, a la hora de nuestra muerte no creo que tener dinero o éxito sea de gran relevancia.

En cambio, si nuestro nivel de consciencia en ese momento.  

Por eso, intentar reconectar con nuestra alma tendría que ser nuestro principal objetivo.

Porque del despertar de nuestra alma – del alcance de nuestra luz interior – depende realmente el éxito de toda nuestra vida.

Si no despertamos a nuestra alma, ¿Cómo conseguiremos encontrar el propósito de nuestra vida?… ¿Cómo podremos expresar nuestros dones y talentos únicos?… ¿Cómo accederemos a nuestra intuición?

Y una vez que los hayamos encontrado ¿cómo tendremos la valentía de seguir nuestro camino sin dejarnos influir por nuestros miedos y dudas?

El simple hecho de vivir requiere coraje.

Y cuando digo vivir, quiero decir recorrer nuestro camino con confianza – siendo fieles a nosotros mismos, dominando poco a poco nuestra mente, sanando nuestras heridas, abriéndonos cada vez más al amor y a la compasión.

Esta consciencia se trabaja – a diario, paso a paso.

Pero, ¿sabes qué? lo bueno de ello es que una vez que emprendemos este camino hacia nosotros mismos, empezamos a ser realmente mucho más luminosos y radiantes… y nadie ni nada puede quitarnos esa pequeña luz en nuestros ojos, nuestra ilusión ni nuestra sonrisa.

Sat Nam,

 Gabrielle – Puranshant Kaur

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