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Un día, una amiga me comento que había dejado de hacer su meditación matutina diaria y que ya no encontraba la fuerza de retomarla.

Ya sabes – nos puede pasar a todos – te saltas un día, luego dos… y quince días después tu práctica de meditación ya es un viejo recuerdo.

Cuando leí su mensaje, le respondí enseguida: “¿Tienes un poco de tiempo ahora mismo?”  Me contesto “Sí.” Y le dije: “Entonces, hazla ya.”

Creo que no se esperaba esa respuesta – pero en el fondo de su corazón, sabía que era la justa.

Hizo su meditación… y desde entonces no la ha vuelto a dejar.

Cualquier cosa que nos planteemos en la vida… no la pospongamos a mañana.

Porque, ya sabes, “Mañana nunca llegará” – siempre tendremos mil cosas por hacer y el tiempo se nos irá volando. Y nuestras ganas poco a poco desaparecerán al igual que nuestra fuerza de voluntad.

Nunca dejes para mañana  lo que puedas hacer hoy.

Empieza ya – no hay mejor momento.

Así que si llevas tiempo planteándote hacer una pequeña meditación – hazla ya.

No esperes a mañana.

Y por cierto, si llevas tiempo pensando en probar una de mis clases, hazlo ya. No lo pospongas porque ya sabes, si no lo haces ahora, nunca lo harás.

Sat Nam

 Gabrielle – Puranshant Kaur

Déjame un comentario abajo. Me encantará leerle (y contestarte).

Y ayúdame a hacer de este mundo un mundo mejor, compartiendo este post con tus hermanas, primas, amigas… u otras mamas. 

Te recomiendo también leer  los artículos que escribo para el Huffington Post de manera puntual. 

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